¿Alguna vez has pensado en disfrutar una Semana Santa en dos continentes? Viajar a Turquía es pisar una capital convertida en la puerta entre Asia y Europa, es disfrutar de las más de 3000 mezquitas de Estambul y es vivir el ambiente más europeo en la plaza Taksim. Pero un viaje a Turquía es mucho más que Estambul. Porque… ¿quién no ha soñado alguna vez con los amaneceres anaranjados, con los globos como telón de fondo, de la Capadocia?

Pero Semana Santa puede convertirse en la ocasión perfecta para adentrarse más a fondo en un país que esconde rincones para todos los gustos. Desde pisar con tus propios pies el castillo de algodón de Pamukkale hasta ponerle cara a las cabezas gigantes de Nemrut, Turquía es impresionante de este a oeste. Y sí, también para los que buscan playa. ¿Qué nos dices de desconectar en las aguas cristalinas de Antalya?