Viaje a Marruecos con el Atlas

Día 2: Marrakech - Ait Ben Haddou
Desayuno y cena.
Por la mañana harás una visita monumental de Marrakech: el minarete de la Koutobia, hermano de la Giralda de Sevilla, es el centro espiritual de Marrakech. Continuarás hacia las tumbas Sâadianas, donde destaca su bóveda central de mármol de Carrara. Posteriormente visitarás el palacio Bahía, ejemplo de la vida aristócrata del medievo musulmán, y donde destaca su sala de embajadores, con su techo en madera de cedro. Ya a pie, visitarás la “Plaza de Jamaá el Fna” declarada Patrimonio de la Humanidad. Después de comer, saldrás atravesando las montañas del Atlas, hacia Ait Ben Haddou, Patrimonio de la Humanidad.
Alojamiento.

Día 4: Dunas de Merzouga - Zagora
Desayuno y cena.
A primera hora, podrás hacer una excursión opcional para contemplar el amanecer. Después saldrás hacia el pueblo de Rissani; la antigua sijilmasa; fue una de las bases de las caravanas que atravesaban el Sahara hacia Tombuctú. Continuarás hasta Ksar el Fida, uno de los antiguos palacios de la dinastía Alaouite. Seguirás por carretera hacia Zagora, llamada “la puerta del desierto”, ciudad que vive de los ricos dátiles que se cultivan en sus oasis y que en la antigüedad fue el punto de partida de las caravanas hacia el África negra.
Alojamiento.

Día 6: Taroudant - Agadir - Essaouira
Desayuno.
Por la mañana visitarás Taroudant, conocida como la pequeña Marrakech, podrás conocer sus famosas 9 puertas de acceso a la antigua ciudad. Continuarás hacia Agadir, un pueblo pesquero y moderno que atrae muchos visitantes. Visitarás allí, el Sook el Had, la medina y, la Marina con la corniche. Tendrás tiempo libre hasta continuar por una bonita ruta costera hasta Essaouira.
Alojamiento.

Día 7: Essaouira
Desayuno.
Hoy visitarás esta ciudad fortificada, residencia de artistas y también centro vacacional. Essaouira fue declarada Patrimonio de la Humanidad. El color blanco y azul domina este pueblo pesquero. Podrás adentrarte en las antiguas murallas, para conocer los sokos y la artesanía local. Acabarás con una imagen espectacular del océano Atlántico desde la Skala. Tendrás tiempo libre para comer y tomarte algo, aprovecha para degustar el pescado fresco que llega cada día al pueblo.
Alojamiento.