Viajar a Borácay es descubrir un paraíso costero que no tiene nada que envidiar a los mejores destinos del Sudeste Asiático. En Borácay hay playas para todos los gustos, como las salvajes de Pukka, Yapak o Diniwid para los que busquen intimidad o Bulabog, ideal para amantes de los deportes acuáticos. Además... ¿Sabías que las aguas que la bañan son consideradas las más cristalinas del mundo? ¡No se puede pedir más!
"Un trocito de paraíso espera en Borácay y en sus playas vírgenes de arena blanca"
Desde recorrer sus playas y jugar con las olas en sus aguas cristalinas, hasta sacar el mejor partido a la cámara de fotos paseando por los tres barrios o “stations” que forman la ciudad, hay miles de cosas que hacer en un día durante un viaje a Borácay. Y, cuando empieza a caer el sol, una nueva ciudad despierta: los malabares que inundan las calles, los buffets de mariscos que ofrecen verdaderas delicias y la música de los bares muestran una ciudad muy distinta pero también divertida. Porque sí, el sol y la playa invitan a bailar por la noche, ¿verdad?