¿Te imaginas estar en el lugar exacto donde se originaron todas las historias que hicieron a Bram Stoker escribir Drácula? Y es que en tu viaje a Rumanía no encontrarás solo un Castillo de Vlad Tepes, el príncipe valaco que inspiró la historia, sino dos: el verdadero, el de Poenari, ¡del que quedan solo las ruinas! y el Castillo de Bran, bien conservado, donde aprenderás tanto del Drácula verdadero como del ficticio. Pero, ¡espera! Que los castillos tenebrosos no son las únicas maravillas medievales que ver en Rumanía. Las ciudades como Brasov o Cluj, los monasterios de la Bucovina y las iglesias fortificadas dispersas por el país, ¡dan buena prueba de ello!
"¿Sabías que Rumanía tiene la mayor concentración de osos pardos de Europa?"
¡La naturaleza que encontrarás en tu viaje a Rumanía tampoco te dejará indiferente! En la región de Transilvania se encuentra el Glaciar Scarisoara, ¡el segundo más grande del mundo!, y el Parque Nacional Piatra Craillui, que además cuenta con algunos de los últimos bosques vírgenes de Europa. Pero si hay un punto fuerte en la naturaleza de Rumanía, ese es la costa del Mar Negro, sus balnearios y el Delta del Danubio, reserva de la Biosfera. Todo esto, con el añadido de ser un país nada masificado y en el que se continúa con labores centenarias como el pastoreo o la herrería, convierte a Rumanía en uno de esos lugares que hay que visitar al menos una vez en la vida ¿Te vienes a la tierra de los Cárpatos?